DÍAS DE RADIO - Parte I


Me considero encuadrado dentro de la generación “Mafaldesca” que creció, como parte de su vida, con la radio. De la época en que no te dejaban salir a la siesta, la tele tenía dos canales y empezaba a las 6 de la tarde, no había Internet, ni cibers, ni Play Stations. Entonces no quedaba otra que inventar nuestros propios juegos. Porque dormir la siesta era la pérdida de tiempo (y vida) por excelencia. Y uno de mis pasatiempos favoritos era escuchar radio. Primero en un viejo Wincofon, y más tarde en una Sanyo FM de un solo parlante. La música se escuchaba tan mal !!! Pero no lo sabíamos. Cuando era adolescente pasaba horas y horas grabando y “enganchando” temas en el radiograbador (los de mi generación sabrán a que me refiero). Ya un poco más grandecito, en épocas de Facultad de Arte, hacía mis presentaciones para Diseño Gráfico de noche en mi tablero prendido a “Los habitantes de la noche”. Y un poco después, ya trabajando todas las mañanas, la AM era mi permanente compañía, con la Nihuil y el viejo equipo humorístico de Jorge Sosa. Aún hoy sigue siendo mi compañera con “Rock & Pop” y la Negra Vernaci y Mario Pergolini. Jamás la radio perdió para mi el encanto, la magia, el embrujo.

Quiso el destino, hace exactamente 12 años, que la oportunidad de formar parte de ese maravilloso mundo llegara a mis manos.

Pero esa es otra historia...

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